Chicago, IL — Hoy, la administración Biden anunció la extensión de 18 meses del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para El Salvador, Honduras, Nicaragua y Nepal, como parte de sus acciones ante la demanda Ramos v. Mayorkas. Esto significa que sólo las personas de esos países que ya tienen TPS recibirán 18 meses adicionales de autorización para vivir y trabajar en los Estados Unidos. Esta decisión deja por fuera a miles de personas de esas nacionalidades que se encuentran en EE. UU. y carecen de estatus migratorio regular, negándoles alivio contra la deportación y autorización para trabajar. Ante esta situación, Alianza Americas, una red de 57 organizaciones lideradas por migrantes de Latinoamérica y el Caribe, emite el siguiente pronunciamiento.

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“Lamentamos la tímida acción del presidente Biden de solamente otorgar una extensión de 18 meses para los países afectados bajo el litigio Ramos v. Mayorkas. Solamente las personas actualmente beneficiadas con el TPS de El Salvador, Honduras, Nicaragua y Nepal recibirán dicho alivio. Esta decisión deja fuera a miles personas de los mismos países que han sido una parte integral de sus comunidades en los Estados Unidos durante más de cinco años, y muchas de las cuales tienen hijas e hijos ciudadanos estadounidenses”, dijo Yanira Arias, directora de Campañas de Alianza Americas y beneficiaria de TPS de El Salvador. En su decisión el Departamento de Seguridad Doméstica (DHS) también dejó sin efecto los argumentos de la administración Trump que pedía la cancelación del beneficio de TPS para las personas de las nacionalidades mencionadas. “Este es un paso positivo, pero ejecutado demasiado tarde. Le tomó tres años a la administración Biden desvincular su apoyo a los razonamientos antojadizos, xenófobos y discriminatorios de Trump para cancelar el TPS”, agregó Arias.

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Durante los últimos años, organizaciones como Alianza Americas y sus organizaciones miembros y organizaciones aliadas urgimos a la administración Biden a que usara su poder ejecutivo para otorgar nuevas designaciones de TPS para El Salvador, Honduras, Nicaragua y Guatemala, como una medida para proteger a más personas sin estatus regularizado, debido a que las condiciones sociales, políticas y económicas de sus países de origen no han mejorado, al contrario, se han visto deterioradas. “Urgimos a la Casa Blanca a reconsiderar el anuncio hecho hoy. En el pasado Biden ha otorgado nuevas designaciones de TPS a otros países. Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, y Nepal tienen todos los argumentos para nuevos alivios. La administración Biden ha ignorado a miles de personas que trabajamos y hacemos grande a esta nación”, dijo Leticia Casildo, Garifuna hondureña de la organización Familias Unidas en Acción.

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En estados como Florida y Texas hay miles de centroamericanos que podrían ser víctimas de las políticas antiimigrantes de los gobernadores Ron DeSantis y Greg Abbot, respectivamente. El TPS es la manera rápida y comprobada de proteger contra las deportaciones. “No podemos celebrar la exclusión de quienes van a ser víctimas de las políticas antiinmigrantes de políticos como DeSantis y Abbot, sus leyes ya están causando daño. Aun es tiempo de que el presidente Biden haga lo correcto, comenzando por reconocer las causas de la migración forzada en estos países como mérito para nuevas designaciones y que ninguno de los gobiernos centroamericanos ofrece garantías de retornos seguros”, agregó Bertha Sanles, nicaragüense, organizadora comunitaria con American Friends Service Committee de Florida.

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Alianza Americas es la principal red de defensa transnacional de organizaciones lideradas por migrantes latinoamericanos que trabajan en los Estados Unidos, en todo el continente americano y en todo el mundo para crear una forma de vida inclusiva, equitativa y sostenible para las comunidades de América del Norte, Central y del Sur.